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El Instituto de Restauración del Patrimonio está llevando a cabo un exhaustivo trabajo de recuperación en cuatro ninots de gran valor de la colección del Museo del Gremio Artesano de Artistas Falleros. El proyecto cuenta, en esta primera fase, con 40.000 euros de presupuesto, y está financiado por la Diputación de Valencia.

 

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Recuperar cuatro de los ninots más valiosos de la colección del Museo del Gremio Artesano de Artistas Falleros. Este es el objetivo del trabajo que desde el pasado mes de noviembre y hasta el próximo mes de febrero están llevando a cabo un equipo de investigadores del Instituto de Restauración del Patrimonio de la Universitat Politècnica de València.

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La finalidad de esta restauración, patrocinada por la Diputación de Valencia, radica en la recuperación de los valores artísticos originales de las obras, ocultos sobre capas de suciedad, barnices envejecidos y repintes. “La mala conservación y las diversas intervenciones inadecuadas que han sufrido estas piezas  a lo largo del tiempo, hacía necesaria una exhaustiva labor de restauración sobre cada una de ellas”, apunta Vicent Guerola, investigador del IRP y responsable del proyecto.

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En concreto, los investigadores del IRP están trabajando en la restauración de “La Vicaría”, de Modesto González, “Una rara especie” de Pepe Puche, “Sastre artesano” de Vicente Agulleiro y “Vencedores y vencidos” de Pepe Martínez Mollá. La primera de ellas la han restaurado in situ en el propio Museo del Gremio por su delicado estado de conservación y las otras en sus talleres ubicados en la Ciudad Politécnica de la Innovación, parque científico de la UPV.

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Además de la restauración de los ninots en los que están trabajando los investigadores de la UPV, el proyecto del Museo del Gremio Artesano de Artistas Falleros incluye también la recuperación del grupo escultórico “El arrastre”, obra de Vicente Luna. En este caso, será el propio Luna quien lleve a cabo la intervención, siguiendo las pautas de la restauración y los requisitos que conlleva.

Junto al profesor Guerola, coordina también los trabajos, el investigador del IRP y especialista en la restauración de Fallas, Toni Colomina. La fase de restauración las cinco obras cuenta con 40.000 euros de presupuesto, financiado por la Diputación de Valencia. La siguiente fase, la restauración de otras tres piezas, “Quijotadas” de Pascual Calleja”; “Els sexes” de José Devís y una cabeza de cera realizada por Regino Mas, contará con 10.000 euros de presupuesto.

La intervención de los investigadores del IRP se ha centrado fundamentalmente en los procesos de limpieza, tanto de la suciedad acumulada como de barnices envejecidos, si bien la eliminación de repintes estratificados ha sido la fase más costosa y decisiva.

“Gracias al uso de luz ultravioleta hemos podido verificar dónde se introdujeron repintes en cada uno de los ninots”, apunta Amparo Lloret, investigadora también del Instituto de Restauración del Patrimonio de la UPV. El proyecto incluye también la consolidación y fijación puntual de los diferentes estratos de los ninots en peligro de desprendimiento, así como su barnizado, para protegerlos de factores externos de degradación. Además, los investigadores han llevado a cabo trabajos puntuales de reintegración volumétrica y pictórica.

Para Vicent Guerola, con este proyecto las esculturas falleras quedan dignificadas, “pues nunca antes se había considerado la intervención sobre las obras indultadas del fuego en las fiestas valencianas con unos criterios tan precisos a nivel técnico, crítico y científico. Este proyecto supone un enorme paso en la puesta en valor del patrimonio material que generan las fallas”.

Esta mañana se ha presentado a los medios de comunicación el proceso de restauración con la presencia de los técnicos, la directora del Instituto de Restauración del Patrimonio, Mª Teresa Doménech; el maestro mayor del Gremio de Valencia, José Ramón Espuig; el vicemaestro mayor, Ximo Esteve y la directora del Museo del Artista Fallero, Mª Pilar Luna.

Fotos: J. Fontán / UPV