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El trabajo de Manolo García se eleva ya a más de 42 metros después del espectáculo de la tarde de ayer.
El trabajo de Manolo García se eleva ya a más de 42 metros después del espectáculo de la tarde de ayer.

Desde que llegaron de forma simbólica las primeras piezas a la conclusión de la Cabalgata del Ninot, la Plaza del Ayuntamiento se ha convertido en un ir i venir de visitantes a la espera de ver en pie la publicitada falla municipal 2017.

Ayer tarde sería el momento, y como así han bautizado ya desde la calle, el pirulí, supositorio, consolador gigante, o en definitiva, la torre de telecomunicaciones diseñada por Santiago Calatrava y reproducida por Manolo García, alcanzaba el cielo valenciano tras un espectáculo de primer orden.
Una multitud de cascos de colores disgregados por la plaza marcaban las diferencias. En una parte los blancos, lo que podríamos llamar la infantería; por otra los verdes, perfectamente organizados para encuadrar la foto, y por otra, los azules, atentos a cualquier movimiento en la plaza.
Una “casquería” colorista que junto a dos grúas, fueron acompañando la plantà “al tombe” de la falla municipal 2017. Unos tiraban, otros miraban, otros posaban, en conjunto, un espectáculo de primer orden.
“Valencia Ca La Trava” una crítica abiertamente al anterior gobierno, quedaba ya en pie a falta de eliminar su esqueleto central de apoyo tras la colocación de sus “patas”. Eso sería esta mañana. Situadas ya las tres estructuras que sujetan el remate, el equipo de Manolo García retiraba el citado esqueleto, y retocaba los posibles fallos de la vareta. En breve, las bases.