Entre las citas que han contado con mayor participación destacan la "Gran Nit de Juliol", que se celebró la noche del sábado 18 con la asistencia de 30.000 personas, y los conciertos de los Jardines de Viveros, por donde han pasado unos 40.000 espectadores.

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Así, según ha explicado hoy el concejal de Fiestas y Cultura Popular, Félix Crespo, durante la presentación de la valoración global de la última edición de la Feria de Julio, la "Gran Nit de Juliol", una iniciativa que se puso en marcha por primera vez el año pasado, y que en su segunda edición ha englobado 20 actos celebrados en galerías de arte, museos y otros lugares públicos en el transcurso de 6 horas, "se ha consolidado como una propuesta lúdica y multicultural".

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El público también ha respondido ante el "importante" cartel de conciertos de la Feria que ha incluido artistas líderes en las listas de ventas como son Joan Manuel Serrat o Miguel Bosé, que han llenado el aforo de la explanada de Viveros. Todos estos conciertos, ha indicado el Concejal, han sido programados y copatrocinados por el Ayuntamiento y los promotores musicales valencianos, "lo que ha permitido el máximo aprovechamiento del presupuesto destinado, unos 130.000 euros, y se ha traducido en precios de entrada ajustados con la calidad contrastada, una media de 2.000 espectadores por concierto y en el afianzamiento de la etiqueta "feria de julio" como referente musical".

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Félix Crespo también ha resaltado las 25.000 personas que el pasado domingo asistieron a la Batalla de Flores, que tradicionalmente cierra las celebraciones de la Feria y que este año ha rendido homenaje al centenario de la Exposición Regional Valenciana, con carrozas adornadas y tripulantes ataviados como a principios del siglo XX; y ha anunciado que, ante la asistencia "masiva" de público que quiere participar en este acto, "el Ayuntamiento estudia la posibilidad técnica de ampliar a dos alturas la estructura metálica que se instala en el Paseo de La Alameda con el fin de aumentar el número de palcos y dar cabida a mayor número de personas".

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Entre las propuestas que la Delegación de Fiestas y Cultura Popular ya baraja para ampliar la oferta de la próxima edición de la Feria de Julio también se encuentran el incremento de las actividades destinadas al público infantil, que este año ya se ha potenciado con actuaciones como la de Fernando Argenta que reunió en la plaza de la Virgen a más de 5.000 niños y familiares, o la exhibición de circo que se celebró en el Parque del Oeste. Otro de los colectivos que se contempla como público de la Feria de Julio, ha comentado el concejal, es el de los jóvenes extranjeros, que vienen a Valencia a estudiar durante los meses de verano.

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Así pues, clausurada la presente edición, que ha superado las cifras de participación del año 2008 que registró la asistencia de 250.000 personas, "el objetivo del Ayuntamiento es trabajar por mantener la etiqueta de calidad de la "Feria de Julio", que es un proyecto ambicioso basado en el producto valenciano y unido a grandes citas como el Certamen Internacional de Bandas de Música", ha aclarado el Concejal, quien ha aprovechado su intervención para transmitir su "sensación de satisfacción por el éxito de la Feria de Julio 2009, que ha destacado por su carácter descentralizador".

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Entre los emplazamientos que se han estrenado este año como escenario de la Feria de Julio se encuentran la pedanía de Pinedo y el barrio de Campanar, "que el próximo año se sumarán a otros núcleos urbanos de la ciudad con el fin de cumplir objetivo municipal de ampliar la Feria al mayor número de zonas".
Por lo que respecta a los escenarios que ya se encuentran consolidados en la Feria de Julio, Félix Crespo ha destacado las actividades falleras que se llevan a cabo en los Jardines del Palau, que este año se han convertido en el "Gran Casal Fallero de la Ciudad", o la plaza de la Virgen, donde con motivo del Concurso de Bailes de Salón se concentraron 5.000 personas.

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Por último el Concejal ha Félix Crespo también ha hablado de la gran cantidad de espectadores, unos 15.000 por espectáculo pirotécnico, que se concentró en el Paseo Marítimo, para presenciar los castillos de fuegos artificiales, que el año pasado se dispararon en el espigón del Puerto.