Castellano ha realizado estas declaraciones tras reunirse con representantes de las Juntas Locales Falleras, y ha manifestado que por primera vez tenemos una "fotografía real de la situación de las fallas en la Comunitat y hemos realizado una propuesta de Decreto para la regulación de las sedes festeras de todo tipo que ha sido muy bien acogido".

Así, de los datos recogidos se refleja que la Comunitat cuenta con 884 fallas -833 en la provincia de Valencia, 33 en la provincia de Castellón y 18 en la de Alicante- repartidas en 96 municipios, y únicamente 137 fallas han generado 339 quejas vecinales de las que sólo 16 han generado un procedimiento judicial abierto".

En este sentido, el conseller de Gobernación ha indicado que precisamente estos datos sacan a la luz que "el 85% de los casales falleros no tiene ninguna queja vecinal, de manera que la inmensa mayoría no tiene ningún problema de convivencia y, por tanto, sólo el 15% estas quejas se concentran en 33 municipios y afectan a 137 fallas".

El conseller ha explicado que basándose en estos datos, la conselleria ha presentado un proyecto de Decreto para "compatibilizar el derecho al ocio y al descanso, pero también velar por la seguridad de los propios festeros".

 

Sedes Festeras

En concreto, el Decreto establece una tipología en función de la actividad que desarrollen estos locales que pasarán a denominarse "sedes festeras tradicionales".

De este modo, la propuesta de Decreto establece tres posibles escenarios, que tal y como ha matizado el conseller, que tienen en cuenta cuestiones como las actividades a realizar, la temporalidad en su apertura y el público al que se pueden dirigir.

Así, Castellano ha explicado que la primera de estas tipologías se denominará Sede Festera de Tipo A, y englobará a los locales en los que únicamente se realicen tareas administrativas, de manera que no necesitarían solicitar licencia de apertura y tampoco se les aplicaría la Ley 4/2003, de Espectáculos Valenciana.

En segundo lugar, Sedes Festeras Tipo B, no abiertos a la pública concurrencia, que sin ser considerados como establecimientos públicos podrían realizar actividades lúdicas y de ocio dirigidas únicamente a los miembros de la comisión. Por ejemplo, estas sedes de Tipo B podrán realizar reuniones y comidas de hermandad, ensayos de presentaciones, preparación de cabalgatas, actividades infantiles o campeonatos de juegos de mesa, entre otras.

Por último, las Sedes Festeras Tipo C abiertos a la pública concurrencia, que estarían abiertos, habitual u ocasionalmente, al público general y por lo tanto estarían sujetos a la Ley de Espectáculos y, por lo tanto, necesitarán contar con licencia de apertura.

Respecto a los horarios de estas sedes festeras, el conseller de Gobernación ha matizado que en los dos primeros casos el horario lo determinará el ayuntamiento, y en el tercero, los de Tipo C, el horario estará sujeto a la Ley de Espectáculos, sin perjuicio de que en las fiestas patronales el ayuntamiento pueda ampliar de manera excepcional el horario en una hora más.

"Además, se prevé la creación de un Consejo de Buenas Prácticas "con el fin de poder buscar entre las partes la mejor solución a aquellos conflictos que se pudieran producir, así como la adhesión voluntaria al Sistema Arbitral de Consumo para evitar la conflictividad judicial", ha asegurado el conseller.

El conseller de Gobernación ha explicado que cada casal, en función de sus necesidades y actividades, elegirá la tipología a la que se quiere adaptar y ha señalado que esta misma semana se remitirá la propuesta de Decreto a las diferentes Juntas Locales y ayuntamientos para que hagan las correspondientes aportaciones que se pondrán en común a principios de año con el objetivo que de que el Decreto esté aprobado durante el primer trimestre de 2011.

"En definitiva, en breve contaremos con un nuevo Decreto que regulará las condiciones y requisitos de las sedes festeras tradicionales, tanto de los casales falleros como del resto de las fiestas tradicionales que se celebran en la Comunitat y por ello en los próximos días la conselleria mantendrá reuniones con el resto de colectivos festeros de la Comunitat para conocer su detalladamente su realidad".

"En definitiva, el objetivo que se persigue es que la tolerancia y el respeto primen en este tipo de festejos que cuentan con un gran arraigo en la Comunitat Valenciana y que conforman una de nuestras señas de identidad", ha concluido Castellano.

Fuente: Generalitat Valenciana