La Beneficencia acogió ayer la presentación del llibret de la falla Juan de Aguiló-Gaspar Aguilar, el cual incluye este año un trabajo sobre la sección Especial obra del periodista Joan Castelló.

La falla Juan de Aguiló-Gaspar Aguilar se ha significado siempre por dotar a sus llibrets de un contenido que va más allá de la simple enumeración de listados y resumen de actividades del ejercicio. Este año, la obra para coleccionistas que supone su llibret se dedica al hecho de que en 2007 se plantará la falla número 500 de la sección Especial. Un trabajo del periodista Joan Castelló monopoliza las páginas interiores de la obra, que incluye, además de las secciones habituales, con fotografías de falleras mayores, la "explicació i relació" a cargo del poeta Anfós Ramón y las actividades de la comisión, una entrevista con Pedro Santaeulalia, último ganador del primer premio de la Sección Especial; unas reflexiones a modo de diario personal de Juan Carlos Donet, el artista de la falla que también lo es a su vez de una comisión de la Sección Especial, y una relación histórica de artistas de la Sección Especial que han plantado falla en la demarcación de Juan de Aguiló-Gaspar Aguilar.
El acto estuvo presidido por las falleras mayores y presidentes de la comisión, y contó con la asistencia de las Falleras Mayores de Valencia, Inmaculada Escudero y Marta Reglero.

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500 fallas de Especial
El trabajo que muestra el llibret, realizado por Joan Castelló, periodista de la Agencia EFE, e ilustrado con casi un centenar de fotografías en blanco y negro y color, establece que en el periodo 1942-2007 se han plantado 504 fallas en la Sección Especial, realizadas por 119 artistas para 54 comisiones diferentes de la ciudad de Valencia y una de la ciudad de Mislata, Cruz y Mislata, la única del área metropolitana que ha militado en esta sección.

La sección Especial se creó en el ejercicio 1941-42 como consecuencia del incremento del número de comisiones (tras la guerra civil se pasó de 35 en 1940 a 78 en 1942) y para consagrar un grupo de elite de comisiones que apostara por los monumentos artísticos, dentro de los nuevos cánones estéticos impuestos por el régimen franquista.
Ninguna de las tres comisiones que integraron por primera vez la Sección Especial (Barcas, Reina-Paz y Plaza del Mercado) continúa hoy en la máxima categoría y han cedido el testigo de comisiones más veteranas a Na Jordana (54 años en Especial), Convento Jerusalén (51), Plaza de El Pilar (48) y Plaza de la Mercé (43).

Las comisiones que más primeros premios han conseguido han sido El Pilar (14), Plaza del Mercado (13), Na Jordana (12), Convento Jerusalén (11), Plaza del Doctor Collado (4), Nou Campanar (3), Plaza de la Mercé (2) y L'Antiga de Campanar (2).

Los artistas que más fallas han plantado en esta categoría son José Pascual "Pepet" (28), José Martínez Mollá (22), Miguel Santaeulalia Núñez (22), Modesto González (16), Vicente Tortosa Biosca (16) y Julián Puche (16).

No obstante, los artistas más laureados han sido Regino Mas (con 14 primeros premios), Salvador Debón (6), Vicente Agulleiro (5), Julián Puche (4), Miguel Santaeulalia Núñez (4), Julio Monterrubio (4), Pedro Santaeulalia (4), Juan Huerta (3), Vicente Luna (3), José Martínez Mollá (3) y Agustín Villanueva (3).

De la historia de la sección Especial quedan en el recuerdo las fallas de Regino Mas en la Plaza del Mercado en la década de los cuarenta; la sátira grotesca de Modesto González y el modelado íntegro en cartón impuesto por Juan Huerta en los años cincuenta; los grandes maestros escultores de los años sesenta (Salvador Debón, Vicente Luna, Julián Puche y Juan Huerta); el triunfo de la caricatura en los años setenta (con Martínez Mollá, Alfredo Ruiz y José Pascual "Pepet"; la lucha por los premios en los años ochenta entre El Pilar (con Vicente Agulleiro como artista) y Na Jordana (con Manolo Martín, Miguel Santaeulalia y Agustín Villanueva); las fallas espectáculo, la nueva estética de Monterrubio y los catafalcos multidisciplinares y de gran contenido crítico de Miguel Santaeulalia en la década de los noventa, y la espectacularidad millonaria de las fallas del siglo XXI.