alejandro01Una vez ustedes lean estas líneas, habrá pasado un mes de septiembre intenso, donde la vuelta de las vacaciones estivales queda para el recuerdo. La actividad frenética del mes post vacacional se ha visto incrementado, a parte de la espera gala de elección de las Cortes de Honor de las Falleras Mayores de Valencia, por las elecciones al Gremio de Artistas Falleros.
Vayamos por partes. Las elecciones al gremio abrirán un nuevo capítulo en la gestión del mismo y el nuevo equipo directivo tendrá que hacer frentes a los innumerables problemas que tienen nuestros artistas. Deben ser la representación de los mismos, deben atender sus preocupaciones y reivindicarlas para mejorar las expectativas de su trabajo, que por cierto, cada vez está más mermado. Se deben de instalar nuevos aires, nuevos vientos que originen un cambio en la trayectoria del mismo, por el bien de todos los agremiados. Tarea nada sencilla ni fácil la que tendrá el nuevo maestro mayor y su equipo directivo, establecer nuevas líneas para los nuevos tiempos que estamos viviendo, por cierto, muy complicados. Desde aquí le deseo lo mejor al nuevo equipo directivo, en defensa de los auténticos
realizadores de la esencia de nuestra fiesta.
Y septiembre, como decía, es el mes más esperado por una gran parte del mundo fallero, donde hemos conocido a las niñas y señoritas que serán nuestras máximas representantes para este ejercicio fallero. Cita ineludible y esperada después de dos meses de verano, donde 146 candidatas esperan que su nombre suene en voz del secretario general, en la Fonteta.
13 niñas y 13 señoritas serán las encargadas de representar a nuestra querida fiesta, y ahora sólo quedarán días para que se produzca la esperada “llamada” en voz de la alcaldesa de la ciudad. Nuevamente se llenarán portadas de periódicos, todos estaremos pendientes de sus nombres, intentaremos entrevistarlas pronto, conocer sus orígenes, compartir la alegría con ellas, sus familias y sus comisiones falleras. De nuevo el protocolo se pondrá en marcha para una señorita y una niña a las que le cambiará la vida por completo. Pasarán del mayor anonimato a ser algunas de las personas
más conocidas de la ciudad y por supuesto nuestras máximas representantes, “les nostres Regines”.
Y una vez pase este momento, de nuevo, la falla será la auténtica protagonista. Presentación de proyectos y maquetas invadirán todos los rincones de nuestra ciudad. Empezaremos a conocer las fallas que podremos ver plantadas el próximo mes de marzo. Empezaremos a hablar, a tertuliar, quizá los más atrevidos hacer quinielas. Empezaremos a escuchar y a leer a los “doctores” de la fiesta, que nunca se equivocan, o casi nunca. Volveremos a ilusionarnos, a esperar con emoción y a darnos cuenta de que de nuevo tendremos una gran competición. Y el resumen de todo esto, es que otra vez y a pesar de la crisis, los falleros volveremos a conseguir plantar falla.
El fallero es así, luchador, trabajador y valiente. Son muchas las barreras que tenemos, pero las saltaremos, las esquivaremos, porque no paramos de trabajar, de creer en lo que hacemos, de hacer falla. Ya que somos incansables, eso sí, no tenemos tiempo ni para un “relaxing cup”...