Miles de falleras y falleros, adultos e infantiles, pertrechados con ropa de abrigo, con polares de colores, con parkas, y, los menos, con indumentaria tradicional, acudían a las Torres de Serranos porque todos habían sido convocados a una cita a las 20 horas. Más tarde averiguarían que su cita sufriría cierto retraso con respecto a los tiempos establecidos desde hace años debido a problemas con el espectáculo y su inspección por parte de los Bomberos, que dejó sin disparar la mitad de fuegos previstos durante el espectáculo. Esa demora provocó el abucheo correspondiente por parte del público asistente.

Antes de todo eso, las inmediaciones de las torres eran una fiesta. En primer lugar, por la animación que cada comisión se pertrecha para acudir a la Crida, bien sea mediante charangas, bailes, torres humanas y otros entretenimientos. En segundo lugar, por la música provista por DJ Boccachico, que ofreció a los asistentes los temas más bailables de todos los tiempos, incluyendo varias melodías del conocido concurso Operación Triunfo. Lo que no sonaron fueron canciones en valenciano, una constante en las que siempre enfatiza la Concejalía de Cultura Festiva.

La fiesta no descansó ni un segundo hasta el comienzo del acto protocolario en las torres. Minutos antes llegaban las Falleras Mayores de Valencia y las Cortes de Honor, quienes, junto a las autoridades presentes, pudieron presenciar mediante la pantalla dispuesta al efecto el espectáculo previo.

Daniela lució un modelo realizado por Flor de Cotó inspirado en principios del S. XX con el espolín Claveles de la firma Garín 1820, tercer traje oficial, con jubón por dentro envarado de manga larga con adorno tableado y abotonadura en seda característico de la época en color teja, así como ahuecador, camisa y enagua de Margarita Vercher. Para la ocasión se le han añadido unos pololos, muy de la época. Las peinetas, del Taller Flor d'Aigua, recuperadas de una pieza antigua, van rematadas en punta y calado, con un dibujo del Cuerno de la Abundancia custodiado por dos ángeles. Esta forma estrenada en la Crida se llamará Daniela Gómez de los Ángeles. El aderezo, regalo de su Corte, está todo realizado en plata de 1ª ley, chapado en oro y piedra engastada.

Rocío, por su parte, llevó un traje confeccionado por En hilos de seda con el espolín Santa Ana en amarillo antiguo. Las peinetas, del Taller Flor d’Aigua, estrenaban una forma nueva que llevará el nombre de la Fallera Mayor de Valencia y con un dibujo exclusivo para ella, sacado del frontal de la corona de la Virgen de los Desamparados.

Las Torres de Serranos fueron el marco del espectáculo que utilizó como base la imagen gráfica de las Fallas 2018, realizada por el estudio Yinsen. La FAM Teatre fue la compañía encargada de realizar la animación previa a los discursos de las Falleras Mayores de Valencia.

Un espectáculo divido en cinco partes, en el que se escucharon los sones de la dolçaina de Emili Someño, se vieron carteles de Fallas y, representando a la seda, un audiovisual proyectado en el mapping donde se pudo ver a las Falleras Mayores de Valencia vistiendo las galas valencianas, todo ello rematado con fuegos artificiales.

Y el momento de la verdad. Las Falleras Mayores de Valencia se dirigieron a las falleras y los falleros, una vez realizada su introducción el alcalde, Joan Ribó, y entregar las llaves de la ciudad a las máximas representantes; unas llaves que por primera fueron custodiadas por Ramón Estellés, secretario general de la JCF que se estrenaba en estas lides.

Daniela Gómez de los Ángeles tomón en primer lugar la palabra, y en un perfecto idioma valenciano, invitó a todas las niñas y los niños valencianos “a fruir de la nostra festa, a conéixer l’hospitalitat de tots els valencians i a sentir l’alegria i felicitat de totes les comissions infantils, perque... ¡Ya estem en Falles!”

La pequeña dio las gracias a los infantiles falleros “per l’esforç i la implicació de tot un any d’activitats”, enunciando a continuación una frase para la historia: “ser faller és la millor extraescolar”. Y es que, como dijo la Fallera Mayor Infantil de Valencia, “les Falles som teatre, som balls regionals, som declamació, som play-backs, som presentacions, som cavalcates, som fòc, pòlvora i tradició”.

Echando la vista atrás, alternando el futuro y el pasado en el presente de los falleros infantiles pidió al público que le siguiera en un cant de l’estoreta velleta que puso el broche a un impecable discurso.

Rocío armó una alocución que pivotó alrededor de los resortes falleros de la fiesta del fuego, citando la labor de los artistas falleros, de los músicos, de los pirotécnicos, y la devoción, “la devoció per la nostra Mare de Deu, la meua mareta, que ens ilumina i ens guia cap a una convivència fallera on preval la igualtat i la tolerancia”.

“M’agradaria que lluitàrem tots junts per un món on siguem socialment iguals, humanament diferents i totalment lliures, perque en la nostra festa la dona té un paper clau i fonamental”, dijo, referiéndose a continuación a su Corte. “Ací teniu el millor eixemple del que estic dient, dotze dones valencianes i falleres. Dones del segle XXI, representants d’una festa que combina tradició i modernitat, una festa reconeguda per la UNESCO gràcies a vosatres, els fallers, que en el vostre esforç, la vostra dedicació i el vostre treball sou el motor fonamental de les falles”.

De los valencianos dijo que son “amables, treballadors, hospitalaris, bona gent, honrats i, per damunt, de tot solidaris”, y que pertenecen a un pueblo “que defensa la seua història i les seues tradicions. Que se sent orgullós de la seua identitat i de la seua rica llengua valenciana”.

Con un mensaje de agradecimiento a los cuerpos y fuerzas de seguridad concluyó un proteínico discurso pronunciado por una Fallera Mayor de Valencia muy emocionada.

Con la interpretación de los himnos Regional y Nacional, y el disparo de fuegos artificiales concluyó el evento, trasladándose a continuación la comitiva a la Real Basílica de la Mare de Deu dels Desamparats, donde se realizó la tradicional ofrenda floral.