La pirotecnia de Alzira quiso celebrar sus treinta años en la plaza, y lo hizo conformando un disparo donde el calibre número 5 sería el protagonista.
No sabemos si por el capricho del aire, el fallo eléctrico conocido posteriormente, o por el ambiente cargado de la plaza, el caso es que mejor si hubieran traído tarta. Hasta la puerta de la jaula parecía querer impedir que el bueno de Vicente y su equipo salieran del coso de la pólvora.
Desde el balcón los problemas parecen menores, y el público como es habitual aplaude a quien tiene el valor de meterse en faena, por mucho que esta no fuera tarde de gloria.

Un balcón donde se pudo ver al exalcalde de Valencia Ricard Pérez Casado quien junto al concejal Carlos Galiana, flanqueaban a las Falleras Mayores en el momento de dar la orden de disparo. Allí también estaba la Fallera Mayor de Valencia de 1983, Begoña De la Concepción, junto al turno de visitas falleras que irían desde Benetuser a Liria pasando por comisiones de la Olivereta, Benicalap, Campanar o Mislata.